11.6.09

En busca del libro soñado

Hace años, llegó a mis manos, por azar azaroso del destino (que a veces nos juega tantas malas pasadas), un libro que había permanecido en el olvido durante más de treinta años. Se trataba de un libro escrito por Encarnación Aragoneses Urquijo, popularmente conocida bajo el pseudónimo de "Elena Fortún", y autora de una de las más recordadas sagas novelescas de literatura infantil en la época de la posguerra: "Celia".

Celia Gálvez de Montalbán se nos presenta, por vez primera, en el libro "Celia lo que dice", a la tierna edad de siete años, y a lo largo de sus páginas, podemos encontrarnos con una niña inquieta, imaginativa y con una manera un tanto peculiar de enfrentarse a las cosas. La infancia de Celia y la de sus hermanos (Cuchifritín, Teresina y María Fuencisla/Mila), se nos irá narrando a lo largo de otros tantos libros, hasta llegar al definitivo "Celia se casa", donde se narran los preparativos de la boda de Celia por labios de Mila, su hermana pequeña, de tan sólo ocho años.

Por increíble que parezca, en 1987 se publicó un nuevo ejemplar de la saga que había permanecido en el olvido durante más de treinta años; un libro donde se autora retomaba el personaje de Celia para narrar los horrores vividos en la Guerra Civil Española. Con el título de "Celia en la Revolución", su publicación se produjo gracias a la Editorial Aguilar en 1987, pero por razones que no alcancé jamás a comprender, el libro no se reeditó nunca más, y actualmente es considerado como un "objeto de coleccionista".

Baste decir que en todos aquellos enlaces donde se ponía a la venta dicho libro, su precio ascendía, por lo menos, a los 152€. Una barbaridad, si tenemos en cuenta que se trata de un libro; pero bien es cierto que, al ser imposible encontrarlo, es un precio que lo merece.

Recuerdo que, la primera vez que lo leí, fue con unos diez o doce años, y accedí al mismo gracias a la Biblioteca Pública, donde, extrañamente, poseían un ejemplar de tamaño tesoro. Recuerdo que lo devoré en un sólo día, y lo releí durante un mes entero, llegando a leerlo, por lo menos, en diez ocasiones.



Sinceramente, me impactó sobremanera, especialmente uno de los primeros capítulos, donde se relata la huída de Celia a su casa de Chamartín y, posteriormente, su estancia en una cercana guardería, para huir de los bombardeos que asolaban Madrid. Recuerdo, especialmente, una escena en la que una de las empleadas de la guardería, amiga de Celia, le narraba a la protagonista la imagen que habían vivido los niños del centro al presenciar, tras los muros de la guardería, la escena que a continuación os narro:

"Señorita, tras los muros del jardín hay unos hombres tumbados. Les entraban las hormigas por la nariz. ¡Qué risa!"

Una frase que, en su día, me sobrecogió sobremanera, ya que narraba cómo unos pequeños, de edades comprendidas entre los dos y los siete años, presenciaban la escena de unos hombres que, tras los famosos "paseíllos", acababan siendo fusilados tras los muros de alguna institución. Las descripciones sobre los horrores de la guerra, es francamente sobrecogedora...

Sin lugar a dudas, Elena Fortún sacrificó a Celia para hacernos llegar, por medio de sus palabras, los crímenes de un período de la Historia de España calificado como uno de los momentos más oscuros: una batalla de hermanos contra hermanos.

Un libro que sigo buscando y que, no os quepa duda, conseguiré algún día.

8.6.09

El Mago de Oz

Muchos de nosotros hemos oído hablar, casi desde niños, de aquella mítica historia en la que una niña de Kansas, Dorothy Gale, era arrastrada por un tornado, en compañía de su perro "Totó/Toto" (no hagamos chistes con el nombre), a un mundo paralelo: al mundo de Oz. Hablamos de mundo paralelo porque, con frecuencia, en las muchas adaptaciones que se hicieron para el cine y el teatro, la mayor parte de los personajes de la tierra de Oz tenían a su némesis en el mundo que conocemos como tal.





Todo comienza con un asesinato: cuando la casa de Dorothy, arrastrada por el tornado, llega a la tierra de Oz, aplasta en su caída a la malvada Bruja del Este, librando de esta forma a la región de "Pequeñilandia" de la dictadura de la Bruja. Pero Dorothy, pese a la belleza de la tierra de Oz, desea volver a la desértica Kansas, junto a sus tíos Henry y Em. Sin embargo, tal como le comunica el Hada Buena del Norte, no hay nadie en la tierra de Oz que pueda cumplir su deseo, salvo el Gran Mago de Oz, que vive en la Ciudad Esmeralda. Para llegar a tan mágico lugar, habrá de recorrer un camino de baldosas amarillas, a lo largo del cual se encontrará con tres pintorescos personajes:

- El Espantapájaros, que ansía tener un cerebro.
- El Hombre de Hojalata, que ansí tener un corazón.
- El León Cobarde/Miedica, cuyo máximo deseo es tener valor.

El resto es historia...

Basada en la novela de Frank Baum, quizás la más famosa adapatación cinematográfica fuese la del año 1939, protagonizada por una joven Judy Garland que, pese a lo que pensasen los más acérrimos defensores de la cinta, contaba con 16 años en el momento de la filmación, y distaba mucho de la edad de la auténtica Dorothy retratada en las novelas de Baum. Igualmente, la película se centraba más en el aspecto meramente escénico, haciendo de cada escena un montaje musical que, en ocasiones, te deja con la boca abierta. Y no precisamente por su magnificencia o por la ingeniosidad de las canciones, sino por todo lo contrario. Aun así, es destacable la canción con la que Judy Garland abre paso a la trama, ganadora de un Oscar: "Over the Rainbow".

La película, tuvo una secuela en el año 1985. Lamentablemente, fue objeto de muchas críticas por los defensores acérrimos de la cinta de 1939. Con el nombre de "Regreso a Oz" ("Return to Oz"), se nos presenta a una Dorothy Gale que, lejos de ser la niña alegre y despreocupada que conocimos, es una pequeña traumatizada por las experiencias que le tocó vivir en la tierra de Oz; experiencias que nadie se cree y que le impiden dormir por las noches. Ante la actitud aparentemente extraña de la niña, su tía decide enviarla a un hospital especial (un manicomio, con todas las letras), para que, a base de descargas eléctricas, eliminasen esas fantasías de la mente de Dorothy. No obstante, una misteriosa niña la salva de la mesa de operaciones y la conduce de nuevo al país de Oz.

Pero Oz ha cambiado notablemente... Para mal...

Igualmente, se introducen nuevos personajes, como el Rey Gnomo, la princesa Mombi, los rodadores (son los nuevos villanos); y, como nuevos amigos de Dorothy, Tick-Tock (el puto amo), Calabaza Jack y la gallina Bellina.

La película, pese a las críticas, sigue más el guión realizado por Baum en la obra original y, pese a ser más oscura que su predecesora, cuenta con escenas mucho más logradas y una trama bastante mejor hilada que la versión de 1939. Hay varias escenas destacables, como puede ser la escena en que la princesa Mombi elige una de las cabezas de mujeres hermosas que guarda en vitrinas (algo que, para la época, pudo parecer bastante lúgubre); y la escena en la que el Rey Gnomo va adquiriendo la humanidad que tanto ansía.

Es de destacar que se criticó mucho la edad de Fairuza Balk, que entonces contaba con nueve años de edad, a pesar de que, según los libros de Baum, era una edad más aproximada a la que contaba Dorothy, y no los 16 años de Garland.

Pero no podemos finalizar este post sin hacer mención a la serie anime de los años 80, que, con más de cincuenta capítulos, permaneció en antena durante tres temporadas, y no hizo sino una de las más fieles adaptaciones para televisión de la saga de Oz.

Y no podemos olvidar al grupo de folk-metal español, Mägo de Oz, que le hizo un sentido homenaje a la primera versión cinematográfica de la obra, con su videoclip "Hoy toca ser feliz".



Sólo recomendaros la segunda versión, "Regreso a Oz", por ser más fiel a la original y porque... ver a Tick-Tock en acción es memorable.

7.6.09

Elecciones al parlamento europeo (del horror)

A estas horas espero que ya todos estéis en disposición de votar a vuestro representante en el parlamento europeo ejerciendo vuestro derecho a expresar vuestra voluntad a través de las urnas.

Pero son éstos tiempos aciagos en los que los candidatos no hacen más que tirarse trastos a la cabeza, basarse en insultos mutuos y eliminar de sus discursos medidas reales... ¿no os da la sensación de que estamos eligiendo entre dos males?

Si es así, ya que estamos eligiendo un mal ¿por qué no elegimos el peor de los males? ¿Por qué no votar a Cthulhu para que vuelva a convertir el mundo en el abismo primigenio del que todo proviene?

Y es que desde Miskatonic.es se están encargando de promocionar la campaña del más temible de los Arcanos, el único que, de verdad, piensa acabar con todos los males de este mundo, incluso con las personas y sus tierras, dejando su gobierno en manos del caos y la abominación.

Aquí podéis ver una de sus últimas ruedas de prensa a colación de un asuntillo sin importancia, sobrevalorado por la prensa. Y a continuación, al igual que su compañero primigenio Hugo Chávez, Cthulhu también tiene su propio programa de televisión, en el que podemos conocer a grandes rasgos las líneas de actuación de su programa electoral.



¡Bendita democracia!