Pocas veces he podido decir, a lo largo de los últimos tiempos, que un plan pueda entusiasmarme más o menos. Pudiera ser que es porque, en ocasiones, siento ganas de abrir mis alas y volar sobre todo aquello que me rodea, sobre la tierra que me vio nacer.
Pudiera ser que siento ganas de cambiar de aires, huir de la rutina, y tener la mente alejada de este mundanal ruido en el que se ha convertido mi vida diaria en los últimos tiempos.
Cuento los días que me quedan para poner rumbo a Santiago, a esa tierra de piedras mohosas, a la Catedral centenaria cuya escalera vio mis primeros pasos en este mundo...
Cuento los días para que llegue la Nochevieja.... Una Nochevieja que se presenta más especial que otras, pues cambiaré de rumbo, y mis pasos me llevarán a tierras lejanas. Aún no sé muy bien cuál será mi destino, pero puede que sea un lugar, más allá de las fronteras españolas...
Pudiera ser que siento ganas de cambiar de aires, huir de la rutina, y tener la mente alejada de este mundanal ruido en el que se ha convertido mi vida diaria en los últimos tiempos.
Cuento los días que me quedan para poner rumbo a Santiago, a esa tierra de piedras mohosas, a la Catedral centenaria cuya escalera vio mis primeros pasos en este mundo...
Cuento los días para que llegue la Nochevieja.... Una Nochevieja que se presenta más especial que otras, pues cambiaré de rumbo, y mis pasos me llevarán a tierras lejanas. Aún no sé muy bien cuál será mi destino, pero puede que sea un lugar, más allá de las fronteras españolas...
2 comentarios:
Ma como!!!! Presto bambina!!
(Ahí lo dejo XD aunque por una parte, como si vamos en esas fechas serán días de fiesta, pues no sé yo si podríamos visitar todo lo que nos gustaría visitar...)
Lo que es seguro es que a Chiclana no iréis :D
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