Ghost Hound

A falta de tres capítulos para terminar esta serie, voy a hablaros un poquitín de ella. Se llama Ghost Hound, y es del director de Serial Experiment Lain y la productora de Ghost in the Shell.

Con estos antecedentes es previsible que la serie trate temas sobrenaturales, como los viajes astrales, los fantasmas, espíritus y antiguos cultos a dioses desconocidos. En la historia, tres chavales aprenden que pueden abandonar su cuerpo y viajar con su alma a lugares misteriosos que se relacionen con sus historias personales... Mientras el protagonista fue víctima de un doloroso secuestro siendo pequeño, los otros se caracterizan por tener agorafobia y un trastorno antisocial... unos perlas todos.

Pero en esta serie lo más importante no es la historia, que personalmente me ha defraudado un poco después de las expectativas que me había creado con los primeros capítulos. Lo más interesantes son sus personajes, que están muy bien caracterizados: descubrimos cómo se comportan a ojos de los demás pero, en la soledad y en la confianza, afloran sus miedos más profundos. En especial, destaca el personaje de Miyako, una niña, hija de un sacerdote. La niña es genial, porque se muestra tremendamente madura, y cada intervención suya deja a los demás como críos, siendo el personaje más joven de la serie, además de uno de los más importantes. El estilo de dibujo infantil y sencillo ayuda de especial manera a que Miyako tenga una de las miradas más penetrantes y desconcertantes que haya visto en un anime.

Y el otro de los aspectos es el sonido. En primer lugar, en los resúmenes de capítulos anteriores, prescinden de los diálogos y los sustituyen por sonidos de radio, apagados, o algo que parece subacuático... y la serie está plagada de campanas, timbres y psicofonías que introducen al espectador en este mundo misterioso...

Os pongo un par de videos, en los que también podéis ver el opening, que mola mucho porque es jazz, o big band, no sé, pero es muy original y tiene mucho ritmo. ¡Ahí lo lleváis!