Os sorprenderá que precisamente yo hable de una ciudad en la que jamás he estado, pero de la que casi he "mamado" desde que estaba en la cuna. Y es que era un elemento casi ritual que mi padre, cada vez que llegaba el día 1 de Enero, pusiese el concierto de Año Nuevo ofrecido en directo desde el Teatro de la Ópera de Viena.
Siempre que veía ese maravilloso teatro, esa orquesta, las gentes tan bien vestidas, pensaba: "Ojalá estuviese yo allí".
Quizás mi pasión por Austria (y por Viena en particular), sea un poco más reciente de lo que cupiera esperar. Pudiera ser por mi sempiterna pasión por la Historia, y por el conocimiento de personajes históricos que marcaron un antes y un después en el transcurso de la historia de la humanidad. Tal es el caso de Sissí, emperatriz de Austria y princesa de Baviera, cuya vida plasmé someramente (y no con la maestría ni la belleza que se mereciese), en éste, mi espacio.
Cabe señalar que, desde siempre, pensé que mi viaje a Viena coincidiría con el Viaje de Novios que toda pareja sueña, compaginándolo con un fantástico crucero por los fiordos noruegos (la niña es tonta, vaya!!). Igualmente, siempre pensé que mis ojos disfrutarían antes la visión de la Ciudad Eterna (Roma), que de la Ciudad Imperial.
Una vez más, el Destino ha dado una vuelta de tuerca en mi favor. Y es que, señores, la que os suscribe estas líneas os comunica una noticia que aún no he asimilado por completo: el día 12 de febrero del presente año 2009... NOS VAMOS A VIENA!!
Un regalo hecho por parte de mis progenitores, mi hermano y mi novio (que a la vez será mi acompañante) y que considero que no merezco en absoluto (a pesar de que mis ganas por conocer la ciudad son inconmensurables).
Ahora toca aprender lo básico del alemán y mejorar un poco el inglés (porque me temo que habrá poca gente que nos hable en español XD). En fin, algún día tendría que emplear el inglés aprendido.
Siempre que veía ese maravilloso teatro, esa orquesta, las gentes tan bien vestidas, pensaba: "Ojalá estuviese yo allí".
Quizás mi pasión por Austria (y por Viena en particular), sea un poco más reciente de lo que cupiera esperar. Pudiera ser por mi sempiterna pasión por la Historia, y por el conocimiento de personajes históricos que marcaron un antes y un después en el transcurso de la historia de la humanidad. Tal es el caso de Sissí, emperatriz de Austria y princesa de Baviera, cuya vida plasmé someramente (y no con la maestría ni la belleza que se mereciese), en éste, mi espacio.
Cabe señalar que, desde siempre, pensé que mi viaje a Viena coincidiría con el Viaje de Novios que toda pareja sueña, compaginándolo con un fantástico crucero por los fiordos noruegos (la niña es tonta, vaya!!). Igualmente, siempre pensé que mis ojos disfrutarían antes la visión de la Ciudad Eterna (Roma), que de la Ciudad Imperial.
Una vez más, el Destino ha dado una vuelta de tuerca en mi favor. Y es que, señores, la que os suscribe estas líneas os comunica una noticia que aún no he asimilado por completo: el día 12 de febrero del presente año 2009... NOS VAMOS A VIENA!!
Un regalo hecho por parte de mis progenitores, mi hermano y mi novio (que a la vez será mi acompañante) y que considero que no merezco en absoluto (a pesar de que mis ganas por conocer la ciudad son inconmensurables).
Ahora toca aprender lo básico del alemán y mejorar un poco el inglés (porque me temo que habrá poca gente que nos hable en español XD). En fin, algún día tendría que emplear el inglés aprendido.
¡¡¡NOS VAMOS A VIENA!!!
2 comentarios:
Como no vayais a la ópera me tenéis que devolver el dinero, cerdos.
No te quejarás :) A disfrutarlo a más no poder y a gozar con Versalles (to confundío).
Yo me conformo con algún conciertillo de orquesta incluso, pero si vamos a la ópera, pues mejor que mejor :)
Ya queda menos de un mes!!!
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