El 21º en caer, y ya quedaban menos...
Pero el Rey Koh era consciente de ello. Por eso reunió a sus mejores hombres bajo el mando del general Arghem, sin duda el mejor de sus oficiales. Jamás habían perdido una batalla y, si cayera derrotado en alguna, el propio Rey Koh se rendiría como monarca y abdicaría. Koh era un rey sabio que sabía mucho de todos sus enemigos, debido a su dilatada experiencia.
- Majestad... ¡El general Arghem se ha quitado la vida! - contestó conmocionado uno de ellos.
- ¡Maldita sea! ¿Y dónde han ido todos? ¡Esto está desierto! - continuó el rey, lleno de rabia.
- La mayoría han salido corriendo del campamento...
Koh no quiso preguntar nada más. La única razón por la que un hombre tan frío y leal como Arghem se hubiera quitado la vida podía ser no haber cumplido con su deber ¿por qué si no? Eso explicaba que faltaran tantos hombres. Podían haber sido hechos prisioneros o simplemente huyan ante lo que se les venía encima.
El principal error del Rey fue no seguir preguntando. Si así hubiera sido podía haber comprendido todas y cada una de las casualidades que se habían producido en ese campamento esa noche y que le hubieran abierto los ojos para contemplar la victoria de su ejército. Sin embargo, pese haber ganado la batalla, el Rey había sido vencido, sus hombres muertos y su reino comenzaría a caer en declive.
"¿Qué ha pasado aquí?" o simplemente "¿Hemos ganado?" hubiera sido suficiente. Quizá descortés, ya que no se habría preocupado directamente por la vida del general, pero habría valido la pena. Esto no es una moraleja. Tampoco creo que sea una paradoja, o una casualidad. Es una historia como otra cualquiera.
El Rey Koh fue el último en caer, y con él todo un ejército.
Hasta aquí las historias de los 21 guerreros que cayeron en las batallas de Valdher. Ha pasado mucho tiempo desde que empecé a publicarlas en este blog y hoy, 6 meses después, termino esta labor. Espero poder rematar la faena con un epílogo a estas aventuras, y que no tarde mucho. Un saludo y volveremos a encontrarnos en el Rincón Literario.
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